Rikku Albarn...

por **Rikku** Mar Ago 09, 2011 10:33 pm

~ Nombre completo: Rikku Albarn (favor de no llamarle “Kuku”; le fastidia~)

~ Edad: 16 años, aparentes y reales.

~ Raza: Hibrido de vampiro y natura…

~ Preferencia: Suke (mayormente uke, pues su lado seme es más como de “hermano mayor protector”). Fértil.

~ Rango: Rebelde. Trabaja además como prostituto, aunque en ocasiones tiene que hacerla de ladrón por necesidad.

~ Poderes:
Le fueron legados ciertos aspectos de su madre, puesto que es una cría de un natura pantera. Como tal, tiene la particularidad de poder esconder o mostrar un par de sensibles orejitas blancas que suelen confundirse con sus cabellos alborotados, así como una larga y elegante cola del mismo tono (detalle que le extraña, puesto que su progenitora era morena): claro que estas no son solo de adorno. Al mostrar sus partes felinas, la agilidad natural de su sangre vampirice aumenta, así como la velocidad, su fino oído, el tiempo de reacción es mucho más rápido. Es atento desde su nacimiento: nunca se le escapan los ademanes que puedan dar a conocer algún ataque. Su visión en la oscuridad está muy desarrollada… en realidad, fuera de ello, no tiene más poderes. Excepto por su empatía, algo común en los gatos, y que le sirve de bastante para zafarse de situaciones peligrosas.

~ Descripción Física:
Posee de altura alrededor de 1,70 cm., una estatura media para su edad. Piel bastante blanca, lechosa, y tan pulcra como suave, cabellos que suele llevar como máximo a la altura del hombro de un tono azulino celeste tan claro que se le suele confundir con albino y bastante alborotado, enmarcando un rostro con forma de corazón que siempre suele ir decorado de una relajada y divertida (o cínica) sonrisa en sus labios delgados, una naricilla pequeña en contraste con sus grandes ojos miel, bastante expresivos, y con la pupila finamente alargada cual la de un verdadero gatito. Cuerpo menudo, cintura estrecha, caderas marcadas, piernas y brazos firmes más de apariencia suave, un tanto andrógina a la sensualidad que despide. Además de ello, lleva un tatuaje de estilo tribal de una mariposa en el vientre, justo al lado derecho del ombligo, y rodeada de algunas curvas más.
Spoiler:

~ Comportamiento:
Toda una joyita, con todo el sarcasmo posible de la palabra. Suele ser bastante solitario, ya que no confía absolutamente en nadie debido a su historia familiar y personal, asi como tampoco parece demostrar interés por cambiar lo mismo: si alguien se le acerca suele portarse de forma burlona, traviesa, cinica, sarcástica, cruel, aunque jamás haría daño a alguien de poder evitarlo… en su trabajo como prostituto, cambia radicalmente, portándose tan dócil como algún pequeño virgen de requerirlo o tan lascivo, sensual y descarado como pocos pueden llegar a ser. Está acostumbrado al sexo, por lo que son los pequeños detalles tiernos o preocupados de otros lo único capaz de producirle un sonrojo. En su interior es bastante frágil, razón por la cual si alguien llega a mostrar interés en él se aprovecha de ello para poder tomar todo el dinero posible antes de seguir luchando por su subsistencia: piensa que pasar demasiado tiempo con otra persona le volverá vulnerable, y sufrir de nuevo de esa forma es lo último que quisiera.

~ Le gusta:
• La ropa de tonos oscuros y de estilo gótico, asi como de visual kei: casi siempre se le vera aunque sea con una cadena o una pulsera de pequeños picos en la muñeca.
• Estar cerca de “verdaderos” animales, aceptando incluso antes a los caninos antes que a las personas, sin importar de que raza sean, mientras tiene sus partes felinas fuera, disfrutando de un rato de tranquilidad.
• Como todo felino, adora el pescado, y con su olfato tan fino, siempre anda cerca de flores, o lagunas en todo caso: contrario a lo pensado, adora el agua, y el frio.
• Cuando la “noche” cae. Por su tipo de trabajo, su horario en horas de sueño esta volteado prácticamente del todo: pero no le afecta, pues le gusta bastante notar la serenidad que suele mandar en todo lugar en la madrugada. También es posible que eso incluya cuando canta: no le gusta el público o curiosos.

~ No le gusta:
• Detesta cuando el ambiente esta caluroso y húmedo encima.
• El apio; las personas arrogantes, mentirosas, crueles a las que no les importa herir a otros para su propio beneficio o placer.
• Estar entre las multitudes: o una habitación para joder, o el bosque. Nada de la ciudad… solo en contadas ocasiones pasa mucho rato en las calles o sitios concurridos como el centro comercial.
• Los colores chillones (y las personas chillonas también xD): se alejara como, valga la expresión, gato al agua apenas vea a uno de esos niños mimados que hacen y deshacen a placer.

~ Historia:
No hay mucho que contar, sinceramente, y tampoco deseo que ustedes, panda de fastidiosos, se entere… pero hoy, solo para ti, daré un pequeño resumen de lo que fue y ahora es mi vida. Aunque ambas fueron una completa *** a decir verdad.
Mi madre fue un joven que tenía la maldición de ser fértil sin siquiera saberlo, un natura pantera que me impresiono después de mis primeras miradas y ahora no quiero volver a ver en la vida. ¿Mi padre? Un jodido vampiro que se creía parte de la crema y nata de la sociedad, que le sedujo con palabras bonitas, atractivos regalos y falsas promesas que daban a cambio la docilidad de la gata de mi madre, dejándose tomar por ese imbécil de poca monta que jamás cumplió una sola de sus palabras. El tipo tenia pareja, al parecer, y no quería que mi madre se interpusiese en su “feliz vida”, puesto que ella era solo una diversión: claro que, la muy estúpida, jamás acepto las indirectas del vástago de terminar lo suyo apenas noto que su verdadero amado comenzaba a sospechar de esas salidas que resultaron ser cuartadas… ¿para qué? Oh, no, para nada demasiado importante, como joder hasta que ese natura termino en cinta.

Como dije, mi padre jamás cumplió una sola de sus palabras: para cuando mi madre noto que iba a tenerme, ya se había enterado de que su “amorcito” tenía pareja formal, asi que decidió esperar hasta alumbrarme… yo era solo un bebé en aquel entonces… pero la sangre vampirice logro que creciera de forma más bien acelerada, por lo que fui consciente de principio a fin como madre, conmigo en brazos, iba a tocar las puertas de donde ese cabrón vivía. Yo la amaba, jamás me separaba de ella, y me veía con cariño… al menos hasta que padre le grito de todo por ir ahí con su pequeño bastardo: de alguna manera, después de gritos, golpes y más riñas, madre y yo terminamos en unos calabozos que ese hogar poseía. Pasamos mucho tiempo ahí, el suficiente para que mi aspecto cambiase al de un chiquillo de cuando menos ocho años, mientras que el natura a mi lado solo se la pasaba maltratándome, diciendo que de no ser por mí, padre no me habría rechazado… quien por cierto, tenía otro hijo. De tal palo, tal astilla… y yo, como típico pendejo, deseoso de amor, caí en las redes de ese desgraciado que me uso de juguete por una temporada, hasta que me rompió decisivamente en la cama de su cuarto cuando me resistí por primera vez a tener sexo con él, todo por los susurros burlones que oí de unos esclavos…
Ahí, herido como estaba, por primera vez creí ver un ángel. Laurent, uno de los sirvientes del hogar, un joven maduro de gentil mirada anaranjada como el amanecer y un cabello tan negro y lustroso como la misma noche, me curo. Volví a las mazmorras, humillado, pero con un nuevo y primer amigo… el cual fue asesinado al cabo de medio año por el bastardo que supuestamente era mi padre, y al cual, juntos por una vez desde hacía años, atacamos madre y yo a la vez cuando abrió las rejas para burlarse de nosotros. La desesperación y el dolor logran mucho, a decir verdad.

¿Qué ocurrió con ellos? Ni idea: tengo la sensación de que mi madre le desgarro hasta que padre fue reducido a una masa sanguinolenta, pero no me detuve a ver al notar las puertas a la libertad. No tenía runa alguna, así que… corrí… y corrí… y corrí… hoy en día, sobrevivo como puedo, escondido en medio del bosque, sacando algo de dinero en un burdel (o por mi propia cuenta) que visito a diario, y si la temporada es terrible y la oportunidad jugosa, me vuelvo un ladrón que rara vez recibe puñetazo alguno.

Joder. Ojala me encontrase un maletín con dinero y un boleto fuera de estas malditas cúpulas…

~ Anexo:
• Laurent, poco antes de morir, le regalo una delicada cadena de plata de la cual cuelga un dije hecho con el mismo material en dos bandas entrelazadas y un zafiro de poco más de un centímetro de largo, que al parecer asemeja a un corazón. Siempre le lleva con él, aunque cuando está en horas de trabajo lo lleva escondido en las ropas… por si acaso…
Spoiler:
• Es muy sensible en sus partes felinas, por lo que posiblemente le gruñirá a todo aquel que toque alguna, aunque bien podrían sacarle ronroneos al rascar esas orejitas: otro detalle respecto a estas es que siempre, sin excepción, al mojarse aparecen. Es algo que él no puede controlar, y por lo mismo suele bañarse a solas (aunque pocos clientes pidan algo así antes de caer muertos de dormidos).

~ Foto:
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Papitas rojas ~